Para nosotros, educar no es sólo un «trabajo», ni un «oficio». Educar tiene que ser creer. Tiene que ser buscar.
Para nosotros, educar es una tarea llena de sentido. Por eso, se nos reconoce enseguida por la cercanía, la alegría y la proximidad respetuosa con nuestros alumnos y familias. Nuestra pastoral es alegre y optimista, y respeta con flexibilidad los momentos de cada persona. Nuestra pedagogía lleva también este ADN, que puede en realidad percibirse en cuanto hacemos o decimos. Es porque no venimos sólo a trabajar, sino a creer, a buscar… ¿Vienes con nosotros?